Comienza un nuevo curso escolar: consejos para la adaptación a la escuela infantil

Esta semana comienza un nuevo curso escolar en las Islas Baleares, y con él, numerosos niños y niñas entrarán en las aulas por primera vez. El inicio de la escuela infantil es un momento trascendental tanto para el niño como para su familia.
Se trata de una etapa que se puede vivir tanto con ilusión, como con cierto nerviosismo e incertidumbre, ya que marca el inicio de un proceso de crecimiento, aprendizaje y socialización fundamental para su desarrollo.
Asimismo, conocer la función educativa de la escuela infantil y la importancia del proceso de adaptación puede ayudar a que la transición sea más suave y enriquecedora.
LA “ESCOLETA”: UN ESPACIO DE CRECIMIENTO INTEGRAL
La escuela infantil es un espacio de crecimiento integral que complementa la tarea educativa de las familias. No es solo un lugar donde los niños pasan el día mientras sus padres trabajan, sino que es un espacio que tiene como objetivo el desarrollo emocional, social, cognitivo y motriz de los niños y las niñas.
A través de una metodología activa y participativa, la escuela infantil permite a los niños desarrollar sus habilidades y conocimientos a partir del juego libre, el descubrimiento del entorno y la seguridad en un ambiente afectivo, natural y motivador. A través del juego, que es la herramienta principal de aprendizaje en esta etapa, los niños y niñas experimentan, exploran, expresan emociones y establecen relaciones con los demás.
La función educativa de las escuelas infantiles también implica potenciar su autonomía, ayudándoles a desarrollar actividades de la vida cotidiana, como alimentarse, vestirse o ir al baño, teniendo en cuenta que cada niño tiene su propio ritmo evolutivo y que se debe respetar en todo momento su crecimiento y su estado afectivo individual.
EL PROCESO DE FAMILIARIZACIÓN: CÓMO PREPARARLOS PARA LA NUEVA ETAPA
Las escuelas infantiles ofrecen procesos de familiarización, unos períodos de adaptación en los que se intentan crear vínculos de confianza entre el niño, su familia y el equipo educativo.
No se trata solo de una adaptación física, sino también emocional y social. A través de esta fase de adaptación, el niño puede sentirse seguro y cómodo en este nuevo entorno.
¿CUÁLES SON LOS CONSEJOS PARA INICIAR ESTE PROCESO?
1.- Visitar la escuela antes del inicio del curso escolar permitirá que el niño o la niña empiece a conocer el espacio, el equipo educativo y a los compañeros y compañeras en un entorno familiar y sin prisas. Las visitas guiadas o las sesiones de acompañamiento que ofrecen algunos centros pueden ser muy útiles para reducir el nerviosismo que genera esta etapa.
2.- Previamente al inicio de la escuela infantil, podéis ayudar a vuestro hijo o hija a experimentar pequeñas tareas autónomas como ponerse la chaqueta, coger su objeto preferido o despedirse con un beso. Estas pequeñas acciones ayudan a construir confianza y autonomía, dos aspectos clave en la familiarización.
3.- Seguir una rutina regular, con los mismos horarios para dormir, comer y jugar, facilitará que se adapte mejor a la nueva situación; y, además, les proporcionará seguridad emocional.
4.- Hablar sobre la escuela, utilizar un lenguaje positivo y explicarle cómo será y qué pasará ayuda a disminuir el miedo y a crear expectativas positivas.
5.- En caso de que sea posible, es recomendable comenzar esta etapa con pocas horas e ir aumentándolas progresivamente. De esta manera el niño se acostumbrará de manera gradual al entorno y a las personas que le atenderán.
6.- Los niños y niñas son muy sensibles a las emociones de los adultos. Por eso es importante que, durante la etapa de familiarización, la familia mantenga una actitud tranquila y de confianza. Si detectan inseguridad o ansiedad, podrían sentir más abrumadora la nueva situación.
COMUNICACIÓN CONSTANTE ENTRE FAMILIA Y ESCUELA
El proceso de familiarización y adaptación del niño no terminará en los primeros días. A lo largo de su estancia en la escuela infantil es fundamental que haya una comunicación fluida y abierta entre las familias y el equipo directivo, ya que esto permitirá detectar cualquier necesidad especial, duda o inquietud, y también compartir los avances o dificultades de vuestro hijo o hija.
Por otro lado, en las escoletas gestionadas por enEquip se organizan reuniones informativas, entrevistas o espacios de diálogo para que se pueda comentar cualquier aspecto relevante del niño. Esta colaboración entre familias y maestros es clave para garantizar una experiencia positiva y enriquecedora.